Penny Dreadful (Primera Temporada) (2014)

Nota: 6,5

Dirección: J. A. Bayona, Dearbhla Walsh

Guión: John Logan (creador)

Reparto: Eva Green, Josh Hartnett, Timothy Dalton, Reeve Carney, Rory Kinnear, Billie Piper

Cadena: Showtime

Duración: 52 Min.

“La primera sensación humana que experimenté fue el rechazo. Así que no te extrañe mi odio a tu especie. (…) ¿Era cada nueva criatura abandonada en el momento de su nacimiento? ¿De eso se trataba la vida?”

Caliban. Penny Dreadful.

.

Tras su primera temporada, podemos decir que Penny Dreadful se une, junto a The Walking Dead y American Horror Story, al podio de las mejores series de terror actuales. Lo cual, para qué negarlo, no es muy difícil.

La televisión sigue sin encontrar la fórmula para hacer buen terror. Ninguna cadena, ni siquiera la HBO, ha conseguido elevar el género a la altura de los excelentes productos que abundan en la pequeña pantalla. Penny Dreadful, emitida por Showtime, no es una excepción.

Al igual que otras de su clase, la serie creada por John Logan en colaboración con Sam Mendes, abusa de clichés tan manidos como los largos planos con susto final y los, ya nada sorprendentes, excesos sangrientos. Sin embargo, más allá de los tópicos simplones que se perciben a simple vista –los cuales, por otra parte, nunca se pretenden ocultar—, en esta ocasión se nos ofrece algo más que un conjunto de lugares comunes. No mucho, de acuerdo, pero sí un poco más. Al fin y al cabo, el objetivo es dar espectáculo y entretener durante cincuenta minutos.Tampoco le pidamos peras al olmo.

La idea de reunir a mitos literarios como Dorian Gray, Jack el Destripador o Frankenstein, en un lugar tan sugestivo y poético como la Londres victoriana de finales del siglo XIX, es emocionante, aunque no nueva. Tenemos el antecedente de la mediocre adaptación de “La liga de los hombres extraordinarios” de Alan Moore, que juntaba al doctor Henry Jekyll, al Capitán Nemo, a Allan Quatermain y al propio Dorian Gray en la misma época y lugar, para demostrar que esta buena premisa no tiene por qué crear una buena historia. Por suerte, Penny Dreadful es más que un desfile de personajes célebres. En la sencillez de su argumento se esconden varios matices que la hacen, a medida que transcurren los episodios, más interesante. En cuanto a los elementos artísticos (ambientación, dirección, vestuario, música etc.), están más que logrados.

El director español J.A. Bayona es el encargado de inaugurar este peculiar festín en cuyo menú degustaremos sangre, vísceras, desnudos e insectos. Todo sin censura, con una gran dirección, y con una excelente recreación de Londres a finales del siglo XIX. El argumento, como ya he dicho antes, es sencillo, pero esconde agradables sorpresas.

Timothy Dalton da vida al explorador Sir Malcolm Murray. Éste, junto a la misteriosa Vanessa Ives (Eva Green), anda tras la pista de su hija Mina, raptada por una extraña criatura maligna. Para hallarla, contarán con la ayuda del actor y pistolero Ethan Chandler (Josh Hartnett) y Victor (Harry Treadaway), un joven doctor sin escrúpulos. Dorian Gray (Reeve Carney) y Brona (Billie Piper) completan el elenco protagonista. Pero en cuanto a personajes, conviene ir uno por uno…

Sir Malcolm Murray, aunque se erige como uno de los protagonistas, es un personaje incompleto. Carece del carisma que le sobra Dorian Gray, y apenas esconde misterio, por lo que su desarrollo es bastante plano.

Dorian Gray: joven, atractivo, arrogante y carismático. Es un imán para el resto de los personajes; nadie se le resiste. Su papel en la historia es más que cuestionable, sin embargo, hay que darle tiempo…

Ethan Chandler, a pesar del protagonismo de los primeros episodios, poco a poco va desapareciendo y se abandona a una sosa subtrama junto a Brona (ella, ni fu ni fa). Es entonces cuando salta la alarma: su culo se ve más que su cara. Mala señal.

En cuanto a Victor, el joven doctor, es de lo más interesante de la serie. En su obsesiva y enfermiza búsqueda de lo efímero, hace de la ciencia un juego de la vida y de la muerte que le acarreará grandes (y a veces conmovedores) problemas. Victor no pertenece del todo a la historia principal, pero tiene la suya propia, y resulta muy convincente.

Por último, está la enorme Vanessa Ives, sin duda, la gran protagonista y el mejor personaje. En un principio es la sobriedad hecha mujer, desprendiendo seguridad en cada gesto y palabra que dice. Pero conforme avanzan los episodios (estupendo el quinto dedicado por completo a su pasado) se nos revela como una persona tortuosa y compleja, con numerosos matices desconocidos, que le dan una vuelta de tuerca a su personalidad, haciéndola, como si no fuese evidente desde el primer plano en el que hace acto de presencia, más irresistible si cabe.

A grandes rasgos, el apartado artístico hace gala de una alta calidad. Y gran parte del mérito reside en la opresora, fría y seca fotografía del catalán Xavi Giménez. La ambientación nos permite recorrer las mismas marginales y deprimentes calles londinenses, que en la ficción recorrió Jack el Destripador mientras buscaba sus víctimas. La música del polaco Abel Korzeniowski es un plus en los momentos más emotivos de la serie, aunque a veces su empleo sea reiterativo. Respecto a los efectos especiales… están muy bien, sí, pero en algunos en momentos parecen de Serie B; no por la calidad, que es estupenda, sino por cómo actúan y pelean los monstruos; muy grotescos en ocasiones.

En fin, si buscas una honda interpretación de los grandes mitos literarios, ésta no es tu serie. Si por el contrario esperas un conjunto de acción de misceláneos personajes al más puro estilo de Los Vengadores, tampoco lo es. ¿Qué es entonces Penny Dreadful? Pues ante los ojos de esta cronista, una curiosa y entretenida rareza que cuenta como mayor virtud, con la misma que podría ser su peor defecto: el sustituir el contenido con un buena forma; un estupendo y bonito envoltorio, para los típicos calcetines que todos los años te regalan por Navidad.

John Logan no crea nada nuevo, pero sí sabe cómo hacerlo para que parezca original y ameno. Enseña todas las cartas al inicio del truco, pero marca algunas para irnos sorprendiendo durante el espectáculo. Y bueno, a mí me han convencido los escasos ocho episodios que conforman la primera temporada, y espero con ganas a la segunda. Total, ¿qué hay de malo en abandonarse durante una hora a un sinsentido de violencia y sangre bastante entretenido?

Adriana García Sillero