Tres anuncios en las afueras de Ebbing, Misuri (Three Billboards Outside Ebbing, Missouri, 2017): Festival de cine de San Sebastián
Nota: 8,5
Dirección: Martin McDonagh
Guión: Martin McDonagh
Reparto: Frances McDormand, Woody Harrelson, Sam Rockwell, Peter Dinklage, John Hawkes, Abbie Cornish, Caleb Landry Jones, Lucas Hedge
Fotografía: Ben Davis
Música: Carter Burwell
Duración: 112 Min.
No es fácil, pero en Ebbing (Missouri) estamos todos: imperfectos, arrinconados y heridos. ¿Nuestra existencia? Una comedia negrísima en manos del dramaturgo y cineasta Martin McDonagh, quien consigue dar el salto definitivo sin perder un ápice de los rasgos que ya exhibía en aquel vagón de tren que alumbró su carta de presentación ante la industria cinematográfica (Six Shooter, 2004): sobresalientes repartos corales, cuidada atmósfera estética y diálogos trepidantes. En su nueva película tras Escondidos en Brujas (2008) y Siete psicópatas (2012), McDonagh nos conduce hasta una carretera prácticamente abandonada a las afueras de una pequeña localidad del medio rural estadounidense, lugar donde Mildred Hayes (Frances McDormand) decide iniciar una guerra contra la policía local gracias a la colocación de tres grandes vallas publicitarias donde exige justicia por el asesinato y la violación de su hija. A partir de ahí, un reguero de golpes bajos, agresiones verbales, suicidios, cócteles molotov y, por qué no, patadas en la entrepierna. Y, sin embargo, McDonagh construye personajes capaces de escupirnos y abrazarnos casi en la misma línea de diálogo.
Estamos ante una obra de naturaleza imperfecta -con pequeñas bajadas de ritmo en su segundo acto-, dominada por los impulsos de sus carismáticos personajes, donde cada maldita réplica del guion nos asesta un revés tras otro, ya sea a propósito del racismo, de los medios de comunicación, de los escándalos sexuales de la Iglesia o, sencillamente, gracias a los improperios que se dedican los habitantes de Ebbing. Será a través de ellos, de sus patéticos errores y de sus relativos éxitos, de sus gestos de amor y de odio, cómo conseguiremos empatizar con cada uno de ellos, aunque dentro de este excepcional reparto merecen sendas menciones especiales la madre coraje interpretada por Frances McDormand y el policía racista encarnado por Sam Rockwell.
Sin abandonar aún Ebbing pero con sus recovecos todavía en nuestra mente, solo queda agradecer semejante atrevimiento en tiempos de maniqueísmos vacíos y de lecciones morales de postín. Desde luego, Tres anuncios a las afueras de Ebbing, Misuri es una obra rica en intenciones, en texturas y en lecturas.
Antonio Cabello Ruíz-Burruecos