Los Idus de Marzo (The Ides of March) (2011)
Nota: 7,5
Dirección: George Clooney
Guión: George Clooney, Grant Heslov (Obra de Teatro: Beau Willimon)
Reparto: Ryan Gosling, Philip Seymour Hoffman, Paul Giamatti, George Clooney
Fotografía: Phedon Papamichael
Música: Alexandre Desplat
Justo cuando pensábamos que «Ella es el Partido» representaba un cambio de registro en la carrera del George Clooney director, el protagonista de «Los Descendientes» nos sorprende con «Los Idus de Marzo», una película que destaca por su alto contenido político, como ya lo hiciera anteriormente la fallida «Buenas Noches y Buena Suerte», su segunda película como director. En esta ocasión, las obsesiones habituales del director contribuyen a incrementar la intensidad narrativa, algo que no sucedía en el film anteriormente mencionado, aunque no lo suficiente como para que podamos hablar de una obra redonda.
«Los Idus de Marzo» es una película sólida, en la que George Clooney exhibe una gran mejora en la puesta en escena, y vuelve a demostrar una gran habilidad en la dirección de actores. El ritmo narrativo resulta trepidante y atrapa al espectador en todo momento, incluso cuando el film pierde su rumbo, transformándose repentinamente en un thriller psicológico.
Desconozco la naturaleza de «Farragut North», obra de teatro en la que se basa esta película, pero es evidente que Clooney y Heslov, guionistas de «Los Idus de Marzo», deberían haber evitado la mezcla de géneros en su adaptación, o al menos deberían haberlo hecho de una manera diferente. El film adolece de una grave crisis de identidad y pierde gran parte de la credibilidad ganada en la primera mitad de su metraje, desde el momento en que Clooney se desvía de la apasionante trama política con la que arranca su cuarta película.
«Los Idus de Marzo» muestra el mundo de la política desde un punto de vista crudo y despiadado, confrontando dos formas de ver la vida perfectamente trasladables a cualquier otro ámbito laboral; la inocencia y la integridad del principiante, el pragmatismo y la falta de escrúpulos del tipo experimentado (y desengañado), y el nexo de unión que permite la transición de un extremo al otro: la ambición; un elemento que inicialmente puede ser interpretado como una virtud en el protagonista; algo aparentemente secundario en el candidato demócrata interpretado por George Clooney; pero que en el fondo domina tanto a unos como a otros.
Los personajes interpretados por Ryan Gosling, Phillip Seymour Hoffman y Paul Giamatti (directores de campañas políticas) hacen de la manipulación su forma de vida, creen utilizar a los candidatos como un niño a sus juguetes, cobran una fortuna por algo que no reporta beneficio alguno al resto de la sociedad, dejan al descubierto el prostituido papel de los medios de comunicación en el mundo de la información…
Desde el primer momento, «Los Idus de Marzo» destapa su as en la manga: un reparto prodigioso liderado por Ryan Gosling -que vuelve a realizar una exhibición en toda regla, mostrando una versatilidad y una gama de registros al alcance de los elegidos-, Phillip Seymour Hoffman -un auténtico animal cinematográfico, cuyo carácter llena cualquier plano de cualquier película en la que intervenga-, Paul Giamatti -perfecto, como siempre-, y George Clooney -en un papel que le va como anillo al dedo-.
En definitiva, estamos ante una película que muestra a un George Clooney pesimista y desencantado con la política en general; una película que habla sobre la ambición y la integridad; una película entretenida, trepidante, bien contada y que a pesar de su desdoblamiento de personalidad, merece una oportunidad. Con cada nuevo intento, George Clooney se acerca un poquito más a su objetivo: realizar una gran película; quizás este sea el paso previo.
Carlos Fernández Castro