Kick-Ass 2: con un par (Kick-Ass 2) (2013)
Nota: 6.5
Director: Jeff Wadlow
Guionista: Jeff Wadlow, Matthew Vaughn (Cómic: Mark Millar)
Reparto: Aaron Johnson, Christopher Mintz-Plasse, Chloë Grace Moretz, Lyndsy Fonseca, Clard Duke, Evan Peters, Jim Carrey, Donald Faison
Fotografía: Tim Maurice-Jones
Duración: 103 Min.
Argumentalmente modesta pero mucho más gamberra que su antecesora, ‘Kick-Ass 2’ vuelve a ponerle el traje al joven que una vez soñó con ser superhéroe y lo cumplió. Tras una larga temporada de pereza de casa al colegio y viceversa, Dave decide volver a las calles y no le faltarán enemigos a los que abatir. Todo un ejército de enmascarados decididos a acabar con su nueva alianza de justicieros y sembrar el pánico en Nueva York.
Sin querer dar rodeos, esta secuela es bastante continuista y no da lugar a grandes sorpresas. Es más anárquica y bruta en los momentos de acción, que por suerte no son pocos, y aporta cierto toque de sentimentalismo por la relación de Kick-Ass con su padre y también por la madurez de Mindy, que se ve presionada por dejar las armas, conocer chicos y empezar a comportarse como una adolescente “normal”. Pero la sensiblería es solo pasajera. Hit Girl sigue siendo la chica sin escrúpulos que apuñala y cercena por la mitad a malvados cuando se cambia el pelo rubio por el púrpura. Es un nivel más mortífero, violencia a lo bruto, casi al nivel del cómic incluso en las escenas de persecuciones en las que se siente como en casa. Desde luego Chloë Grace Moretz está de sobresaliente. Pocas actrices tienen su capacidad camaleónica para interpretar roles tan distintos en poco tiempo. Hollywood la espera con los brazos abiertos. Que tiemble Scarlett.
Volviendo al tema, el film continúa ironizando sobre los hábitos tecnológicos del público teenager -smartphones, redes sociales- mientras intenta ridiculizar al clásico instituto dividido entre geeks, deportistas y animadoras. A nivel visual sigue predominando el estilo viñeta, la estética colorida y el modo de narrar una gran cantidad de altibajos de forma que resulte fluido. Todo se encamina hacia un final épico en el que ambos ejércitos combaten y todo parece saltar por los aires. Y está bien la reflexión que lanza sobre dejar a un lado las venganzas personales, así como de ser uno mismo sin importar cómo sea la media.
La (gran) pega es que abunda un humor tonto, disperso e incluso algo misógino que en general mosquea y provoca que lo poco original del guión se caiga por la borda. Además esa liga de la justicia que dirige Jim Carrey apenas pasa de lo entrañable y familiar, y su personaje está a años luz de los que le hemos visto interpretar en decenas de películas. Ninguna línea memorable que guardar para el recuerdo, ni un mal chiste.
Pese a todo ‘Kick Ass 2’ cumple en su cometido de entretener a los amantes del cine originado en el lápiz, del insatisfecho con Marvel y del que llora cuando se imagina a Ben Affleck subido a un batmóvil…
Manu Sueiro