John Muere al Final (John dies at the End) (2012)
Nota: 7
Dirección: Don Coscarelli
Guión: Don Coscarelli (Novela: David Wong)
Reparto: Chase WIlliamson, Rob Mayes, Paul Giamatti, Clancy Brown, Glynn Turman, Doug Jones
Fotografía: Mike Gioulakis
Duración: 99 Min.
Detrás de las llamadas ‘películas de culto’ hay una legión de fans orgullosos e indignados a partes iguales por el hecho de que un objeto de su admiración no tenga más bombo. Dicen cosas del estilo de «¿cómo puede ser que este corto de Švankmajer tenga sólo 1500 visitas en Youtube?», mientras, interiormente, se sienten un poco especiales. A mí también me pasa con algunos autores, pero no con el checo: de su «Alicia»(1988) me gustaron mucho sus primeros veinte minutos; luego no sé, porque me aburrió tan soberanamente que no seguí viéndola. En cambio, siento predilección por Don Coscarelli; que por cierto, también tira del stop-motion en esta peli, aunque con distintas intenciones. Su colorida «Phantasma» (1979), clásico del terror donde los haya, y su desternillante y descabellada «Bubba Ho-Tep» (2002), me tocaron la fibra sensible.
En «John Dies at the End» se riza el rizo, y una novela de culto (que confieso aún no haber leido), escrita por David Wong, es llevada a la pantalla por un director también de culto. Parece que de aquí solo puede salir algo bueno… y así es.
«John Dies at the End» no es para todos; o te encanta o te parece una estupidez bárbara. Solo se la recomiendo a un cierto tipo de espectador: sigue leyendo un poco y decide. A mí me encantó: es disparatada, hay monstruos -ejem- comestibles y tiene ciertas dosis de gore. ¿El argumento? Pues es difícil de explicar. Hay una droga que te abre las puertas a otros mundos, paradojas temporales, preguntas metafísicas, cosas que no están pero están y otras que están pero no están. Aquí, la delgada línea roja que separa el terror de la bufonada, ni siquiera es una línea y tampoco es roja. Toda la película es un disparate y un sinsentido, pero es tal la locura que encierra, que estás disfrutando demasiado de lo que ves y oyes para pararte a pensar que nada tiene ni pies ni cabeza.
Paul Giamatti, ese siempre excelente Homer Simpson de carne y hueso, y Clancy Brown, que interpretó a El Kurgan en «Los Inmortales» (1986), ponen las caras conocidas en una película en la que el protagonista es un desconocido, Chase Williamson, cuyo físico y maneras probablemente lo encasillen en películas de ciencia ficción/terror.
Ah, si pensáis que el título cuenta demasiado… yo he visto la película dos veces y no tengo claro si al final John se muere o no. Ya me diréis…¿o quizá ya me lo habéis dicho?
Marina Torrón