Grand Piano (2013)
Nota: 6,5
Dirección: Eugenio Mira
Guión: Damien Chazelle
Reparto: Elijah Wood, John Cusack, Dee Wallace, Alex Winter, Kerry Bishé, Allen Leech, Tamsin Egerton
Fotografía: Unax Mendía
Duración: 90 Min.
Los nombres de Elijah Wood y John Cusack no deben llevarnos a engaño, «Grand Piano» es una producción española; de acuerdo, los actores son americanos y el guión también, pero esta película demuestra, ante todo, que en este país se puede rodar un cine de género más que digno, sin tener que recurrir al teta-culo-pedo-pis que tanto dañó nos ha hecho en las últimas décadas.
Y con esto no quiero decir que debamos mirarnos en el espejo del cine comercial americano, ni mucho menos; llevamos tiempo intentando adaptar fórmulas ajenas que no encajan en nuestra cultura, ni siquiera disfrazándolas con nuestros trajes más típicos. Pero también sería de locos demonizar cualquier influencia norteamericana que podamos apreciar en nuestro cine; en «Grand Piano», la sombra de Alfred Hitchcock es evidente, pero nunca llega a anular la personalidad de un director, que demuestra conocer el cine de los grandes maestros y haber aprendido algunas de sus enseñanzas.
Porque si en algo destaca “Grand Piano”, es en la tensión que desprenden algunos de sus planos; incluso cuando el guión recurre a situaciones de una inverosimilitud insultante (Elijah Wood escribe un SMS al mismo tiempo que ejecuta una compleja partitura musical al piano), Eugenio Mira sale airoso gracias a un dominio admirable de la puesta en escena. Al terminar el film, uno acaba pensando que, en un futuro próximo, el catalán será un firme candidato a cargar sobre sus hombros proyectos de mayor enjundia.
Desgraciadamente, se aprecia en esta película un virus que últimamente está infectando numerosas producciones de género: el guionista de turno, probablemente acomplejado por haber firmado un libreto sencillo y directo, pretende otorgar una profundidad innecesaria a personajes que solo requerirían de unas ligeras pinceladas para cumplir su cometido. Durante el primer cuarto de hora, la película zozobra ante la impaciencia del espectador, que no logra empatizar con el protagonista; pero cuando el director abandona el calentamiento y entra verdaderamente en materia, nos topamos con una grata sorpresa en forma de modélica película de suspense.
Además de los ecos Hitchcockianos mencionados anteriormente, se perciben reminiscencias del planteamiento que Joel Schumacher empleó en “Última Llamada”. Al contrario que en “Grand Piano”, la película protagonizada por Colin Farrell arranca de manera prodigiosa, activando todos los sentidos del espectador y preparándole para la montaña rusa de emociones que está a punto de experimentar. Pero a la hora de desarrollar el argumento, Eugenio Mira no tiene nada que envidiar al director alemán; ambos limitan su campo de acción, pero convierten esta restricción en una ventaja a la hora de crear tensión narrativa. Además, la película española hace gala de un magnífico empleo de la banda sonora, que se erige en un elemento fundamental para lograr los efectos deseados por el director.
En definitiva, “Grand Piano” es un producto realmente entretenido, que debería funcionar a través del boca a boca sin dificultad; aunque sospecho que Rodrigo Cortés, productor del film y uno de los directores patrios más internacionales del momento, se encargará de promocionarla como merece. Se trata del tipo de películas que necesita el cine español para crear esa ansiada industria cinematográfica que nunca ha tenido. Tan solo me queda una duda después de escribir estas líneas: ¿se hubiera podido financiar esta película con Antonio Dechent y José Coronado como protagonistas?
Carlos Fernández Castro