63 Edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián (Crónica del 20 de Septiembre de 2015)
A la hora de diseñar mi segunda jornada en la 63 edición del Festival, he intentado pescar en diferentes secciones, y así poder catar las estimulantes propuestas que ofrece cada una de ellas. En esta ocasión, me he decantado por dos películas de Horizontes latinos, una correspondiente a la Sección Oficial, y una de las representantes de Nuevos Directores. El resultado ha sido muy revelador. Por el momento, y hasta que las siguientes jornadas demuestren lo contrario, podemos ir calificando la sección oficial como decepcionante, y confirmando el,cumplimiento de las expectativas generadas en torno a los títulos seleccionados para Horizontes Latinos.
Stay With Me (Nuevos Directores) Nota: 4
Tras ver esta película surcoreana, se me hace difícil imaginar cuales han sido los parámetros escogidos para considerarla digna de ser programada en San Sebastián. Mucho tendrá que mejorar el debutante para aspirar a tener una carrera cinematográfica en un país que se caracteriza por sus numerosas producciones de calidad. ‘Stay With Me’ muestra a dos adolescentes que forman parte de mundos y estratos sociales diferentes, y que en circunstancias normales, no deberían haber cruzado sus caminos. Su prometedor arranque en seguida se ve frustrado por la falta de claridad en el desarrollo argumental. El espectador es guiado por un director que camina entre tinieblas y desconoce, o no es capaz de transmitir, el pasado y el destino de sus personajes. ‘Stay With Me’ se asienta sobre la confusión de su discurso, que parece reclamar una alternativa moderada a la laxitud y a la extremada rigidez de la educación surcoreana actual. Falla claramente en su propósito.
Sparrows (Sección Oficial) Nota: 3
Permanecemos en la temática adolescente de la anterior película, pero nos trasladamos desde Corea a la fría Islandia. Separadas por la distancia, unidas por la sordidez y la mediocridad de sus habitantes. ‘Sparrows’ pretende ser una película iniciática en la que un inocente chaval de ciudad (incluso canta en el coro de su iglesia) es corrompido por el comportamiento perturbado, vicioso, e inmoral de los adultos de la Islandia rural. De una vida gobernada por el raciocinio a una existencia dominada por los instintos primarios. En esta ocasión, el director tiene claro su discurso, pero no acierta a imprimir un mínimo de cohesión a todas las situaciones que se suceden en la gran pantalla. De esta manera, los diversos afluentes de su guión desembocan en el vacío más absoluto y ofrecen una ración extra de decadencia y mal rollo que no hacen más que redundar en lo expuesto anteriormente. Interesante planteamiento, decepcionante desarrollo, calamitoso desenlace.
Chronic (Horizontes Latinos) Nota: 7,5
Tras una mañana aciaga, llegaba el momento de paladear la primera delicatessen de la sección Horizontes Latinos: ‘Chronic’. Y he de confesar que la espera ha merecido la pena. Michael Franco no decepciona con su tercer largometraje, una propuesta tan atrevida desde el punto de vista temático como austera en su apuesta formal. Predominan los planos largos y la ausencia de movimientos de cámara, que exigen la monumental interpretación de un Tim Roth de premio. No hay momentos para los excesos ni para los virtuosismos en esta historia cruda y desasosegaste sobre la vida de un enfermero especializado en pacientes terminales. El director mejicano reflexiona sobre la necesidad de redención de un personaje atormentado con su pasado, y el derecho a la muerte digna de aquellos que han perdido las ganas de luchar. Precisamente, es ahí donde radica parte del éxito de un guión sin fisuras, que se alzó con el premio en el Festival de Cine de Cannes 2015, así como en las numerosas e interesantes lecturas que contienen sus situaciones, la aplastante coherencia de su estructura, y su capacidad de conmover sin recurrir a la lágrima fácil. Tampoco conviene perder de vista su homenaje implícito a una profesión tan maltratada por la opinión pública como la de los enfermeros.
La Tierra y la Sombra (Horizontes Latinos) Nota: 7
Avalada por cuatro premios (entre ellos, la Cámara de Oro y el Premio del Público) en la pasada edición del Festival de Cannes, ‘La Tierra y la Sombra’ prometía ser uno de los platos fuertes de la sección Horizontes Latinos. Y la verdad es que la primera película de Cesar Augusto Acevedo es una de esas obras costumbristas que se quedan grabadas en la retina por la sinceridad que desprenden sus imágenes y las emociones que suscita su argumento. El colombiano aborda temas cotidianos como la unidad de la familia y los problemas laborales en un contexto muy particular: un pueblo colombiano cuya economía se sustenta en el azúcar. A su favor, el micro mundo que se crea en torno a la vivienda familiar, donde se desarrollan todos los conflictos entre un abuelo que regresa a casa después de más de una década, el cabeza de familia que vive momentáneamente postrado en una cama, la mujer trabajadora, la abuela que retiene a la familia en un callejón sin salida, y un niño que corre el riesgo de crecer demasiado pronto. Acevedo oxigena la narración a través de las tensiones que se generan entre patronos y trabajadores durante la recogida de azúcar, y reivindica a la mujer como una figura capaz de sustentar la economía familiar sin la ayuda del hombre.
Carlos Fernández Castro