Moon (2009)
Nota: 8
Dirección: Duncan Jones
Guión: Duncan Jones (Historia original), Nathan Parker (Guión)
Reparto: Sam Rockwell, Kevin Spacey, Dominique McElligott
Fotografía: Gary Shaw
Música: Clint Mansell
EN BREVES PALABRAS (para los impacientes)
En ocasiones al poco de empezar una película te das cuenta de estar viendo algo especial, no sabes si te va a gustar o no, pero las primeras escenas te ponen alerta; estás a punto de ver una obra que cuando menos se saldrá de la norma. Esta sensación la tuve con «Moon» practicamente desde que empezaron los títulos de crédito y fue creciendo con intensidad conforme pasaban los minutos. «Moon» es la opera prima del director Duncan Jones, hijo de David Bowie. Haré una aclaración porque he leido muchas cosas raras respecto a esto. El nombre real de David Bowie es David Robert Jones, con su primera mujer tuvo un hijo cuyo nombre completo ( el glam es lo que tiene) es Duncan Zowie Haywood Jones, por lo tanto, ni se ha cambiado el apellido para triunfar por sí mismo, ni reniega de su padre ni nada por el estilo, simplemente es su nombre. Aclarado este tema, sigamos….
La película nos cuenta los últimos días de Sam Bell en la base minera lunar Sarang; vemos como durante los tres últimos años ha desempeñado una serie de actividades; controlar el buen funcionamiento de las máquinas que excavan sobre la base lunar para extraer Helio 3, realizar ejercicios físicos para mantener su cuerpo en forma, hacer una maqueta de un pequeño pueblo 
tallando madera, cuidar unas plantas con excesivo mimo, ver algunas películas antiguas y recibir mensajes grabados de su añorada mujer e hija. Todo esto lo hace día a día acompañado únicamente de un robot llamado Gerty, cuya voz en la versión original corre a cargo de Kevin Spacey, diseñado para ayudarle en todo y protegerle. Le quedan ya muy pocos días para poder volver a la tierra, los tres años que dura su contrato se le están empezando a hacer muy largos, la soledad y la rutina hacen mella en él provocándole visiones que finalmente causan un acciedente que cambiará todo en su vida.
SI QUIEREN PROFUNDIZAR…
«Moon» es un película que sorprende, principalmente porque Duncan Jones demuestra que, al igual que su padre con la música, tiene un don para hacer películas. Sorprende como una opera prima puede acumular tantas decisiones acertadas. Primero, y consciente del bajo presupuesto que manejaba (unos cinco millones de euros), decidió dotar a la película de un aire clásico en toda su escenografía y ambientación; son evidentes los guiños a películas como «2001 Odisea en el espacio» de Stanley Kubrick o «Solaris» de Andréi Tarkovski. Destaca sobremanera la forma de mostrar los paseos lunares con los vehiculos de exploración; y es que en la época de la animación por ordenador, los 3d y demás técnicas modernas, es refrescante ver como con unas maquetas y un magistral uso de la iluminación se pueden realizar escenas de una credibilidad y belleza deslumbrantes. En segundo lugar, acierta de pleno al dar todo el peso intrepretativo de la película a Sam Rockwell, gran actor lleno de verosimilitud, fuerza y que suple su falta de físico con un gran talento interpretativo; en «Moon» esta inmenso. Y por último, acierta en la manera de transmitir emociones a traves de las imagenes y la música, apartado éste a cargo de Clint Mansell ( Requiem for a Dream o The Wrestler) que destaca por su brillantez y la perfecta conexión con las imagenes.
Es verdad que «Moon» mantiene un ritmo narrativo lento durante sus 97 minutos, pero ¿es esto acaso algo malo?, ¿es qué en las peliculas de ciencia ficción tiene que existir siempre un ritmo frenético? Duncan Jones demuestra con un potente lenguaje visual que no es necesario mantener al espectador atrapado a la trama a base de acción. Ahora bien, no tenemos que confundir lentitud con exceso de metraje sin intención o vacio de contenido; en «Moon» todo esta perfectamente planificado para que con el menor número de planos se transmita de manera brillente lo que desea el director. Un claro ejemplo de esto lo encontramos en como narra la vida de Sam en la estación espacial, la monotonía de sus que haceres diarios, la soledad que le embarga y sus ansias de que por fin pueda salir de allí están magistralmente contadas.
MINI SPOILER.
Existe desde mi punto de vista un gran parelismo entre Moon y otra película de ciencia ficción con exito muy dispar, Matrix. Pese a que de forma muy distinta, en las dos se parte del mismo punto de partida para contar sensaciones muy parecidas. 
Si en Matrix Neo descubre que todo lo que el creía real no es más que un programa informático que crea un mundo virtual, Sam descubre que ha vivido una mentira, una vida prestada, es un clon, sus recuerdos son implantes y su destino no es otro que la destrucción. Los dos son manipulados con un fin, obtener energía para el que les tiene engañados;el primero, como nos muestrán de forma tan impactante los hermanos wachowski, es una pila inconsciente y el segundo esta creado con el único fin de obtener el valiosísimo isotopo del Helio 3. Y por último, los dos reaccionan de la misma manera, revelándose ante la tiranía y la mentira. Una vez más la misma historia se puede contar muchas veces de maneras muy distintas.
FIN DE MINI SPOILER.
En definitiva, Moon es una «rara avis» con una intensidad visual y talento narrativo impropios de una opera prima. Muchas veces nos preguntamos porque en España la calidad del cine es tan paupérrima en líneas generales; en ocasiones los defensores de la industria fílmica patria apelan a la falta de presupuesto. Os dejo unas declaraciones de Duncan Jones con respecto al proceso creativo de la película:
«La película fue un desafío para escribirla, tenía que cumplir un criterio bastante estricto establecido por mi productor, Stuart Fenegan, para poder darle a la película la posibilidad de que se hiciera. Tenía que tener en mente un presupuesto muy limitado, de 5 millones de dólares; mantener el reparto al mínimo posible; escribir algo que pudiera hacerse en un estudio y que a la vez utilizara un conjunto de efectos visuales que pudiera maximizar el valor de la producción con un costo mínimo«.
¿ Será posible hacer excelentes películas con bajo presupuesto y hasta de ciencia ficción?…. habrá que ir buscandose otra excusa.
David Rubio Lucas
Buenas!
Podría suscribir tus palabras sin más porque coincido en todo lo que has expresado, una película maravillosa, que sorprende por el resultado logrado con tan poco presupuesto y por la forma de plasmar ese argumento de manera tan bella y eficaz. Es llamativo como bien dices tacharla tan recurrentemente de lenta, pero es justo la manera de transmitir esa soledad con ese paulatino y pesado transcurrir del tiempo en una situación tan aislada, alejada de toda civilización y con una compañía tan omnipresente.
Quizás la comparativa con Matrix, bueno en concreto con el caso de Neo lo encuentre algo forzado, pero si restringimos las múltiples cuestiones e implicaciones que se barajaban en la película de los hermanos Wachowski es cierto que podemos encontrar el paralelismo que describes.
Magistral y recomendadísima, es una cita a la que todo buen cinéfilo tiene que asistir, y quizás en reiteradas ocasiones. Una gran crítica, una gran película.
Un saludo!
Gracias por tu aportación. Con el paralelismo de «Matrix» y «Moon» sobre todo quería poner de manifiesto lo diferentes que son en la forma y los numerosos puntos en común que mantienen. Las dos parten de la premisa del engaño como medio para obtener algo (energía), y en ambos casos lo que se hace es creer al engañado que vive una vida que no es real. Sin duda la trama a partir de aquí en Matrix se desarrolla de manera distinta pero no deja de ser una rebelión ante el engaño, una lucha contra el opresor…. y podríamos seguir hablando de la alineación del pueblo, la sumisión colectiva ante los poderosos etc.. pero eso sería ya harina de otro costal.