Historia de una pasión (A Quiet Passion) (2016)
Nota: 6
Dirección: Terence Davies
Guión: Terence Davies
Reparto: Cynthia Nixon, Jennifer Elhe, Dundan Duff, Keih Carradine, Jodhi May, Joanna Bacon
Fotografía: Florian Hoffmeister
Duración: 125 Min.
Emily Dickinson vivió la mayor parte de su vida recluida, apartada del mundo. ¿Qué buscaba en su aislamiento? ¿Tal vez quería entregarse por completo a su poesía? Quizá, simplemente, su carácter rebelde jamás se adaptó al rígido mundo que le rodeaba, se cansó de luchar y optó por buscar la libertad en el único lugar donde no necesitaba responder ante nadie: su interior.
En consecuencia, y frente a estas interrogantes, que por otra parte saltan a la vista de cualquiera que realice un mínimo acercamiento a la vida de Emily Dickinson, Terence Davies no ofrece explicación alguna acerca de las grandes pasiones de esta poetisa, como es debido, puesto que solo habrían salido de su imaginario o del de algún erudito. Simplemente se remite a su trabajo y habla a través del mismo. Construye el personaje a base de imágenes, como la poesía misma. Nos llena la cabeza con representaciones que dejan abierta una gran puerta a la interpretación. Las causas del delirio de Emily no son explicadas en ningún momento, se intuyen, se sienten. Ahí reside el gran logro de Historia de una pasión.
Pero así como Davies hace gala de esa delicadeza para retratar los sentimientos profundos de la escritora, mantiene una lucha, que por momentos pierde, a la hora de hacerlo con su universo trivial (aunque salga victorioso en la guerra que es hacer un largometraje de estas características). La lluvia en el funeral del padre es un énfasis que la secuencia no necesita. La poesía de Dickinson, que conduce al espectador por las imágenes de la película, es lo suficientemente intensa para admitir acentuaciones visuales. Algunos pasajes del film caen en lo explícito. Sobrepasan los límites y se desprenden hacia el melodrama.
El maravilloso pulso que el director venía mostrando para mantener sus películas en los márgenes más difíciles (y a la vez más fascinantes) del drama se resiente un tanto en esta película. Muy poco, pero lo hace. Como hemos dicho, gana la guerra, pero deja un sabor de boca agridulce que solo su siguiente trabajo podrá endulzar.
Mario Jara
Esta película, tan correcta en su ejecución, su fotografía, su contención protestante, no es en realidad sino un trailer de lo que hubiera podido ser un film sobre Emily Dickinson. El guión da demasiados saltos, de modo que no entendemos bien el porqué se encierra Emily, ¿es una chiflada, un ser excepcional? No lo deja claro el guionista… o no está seguro… o no le echa valor y apuesta por una de las dos posibilidades.
Claro que, profundizar en los motivos, los porqués y la subjetividad del personaje, quizá hubiera hecho que el film fuera más aún para un público reducido y eso no suele convenir a las empresas. Sobre todo hoy día que hay una magnificación de la imagen por encima de las palabras.
Cinthia Nixon está magnífica y nos hace olvidar su papel absolutamente opuesto y tan estupendamente resuelto como éste en la serie «Sexo en NY».
El resto de actuaciones también estupendas, sobre todo la madre y la hermana de la protagonista.
Se me hizo larga y pesada, aunque reconozco su dificultad y muchos aciertos también.