Nominaciones Emmys 2014: Requiem por Los Olvidados

Hace tiempo que ya hemos perdido la cuenta de si estamos ante la edad de “oro”, “diamante” o “platino” de las series de televisión. Lo que es innegable es que nos encontramos ante un momento de muy elevada calidad. El curso que se cierra con estas recién estrenadas Nominaciones a los Emmys de la industria americana, ha destacado por las temáticas planteadas y por unos elaborados y sofisticados trabajos, cuyos resultados ya miran sin complejo (y en algunos casos, con superioridad) a las producciones cinematográficas.

A nadie escapa que unos premios, sean éstos, los BAFTA o los de la casa de la cultura del municipio mas insospechado, están sujetos a multitud de circunstancias, intereses y decisiones arbitrarias. Baste recordar la última edición de los influyentes OSCAR, en los inicios de este año, y su “olvido” de una de las películas más importantes de 2014, Inside Llewyn Davis, para ilustrar que algunas omisiones nos obligan a relativizar la presunta trascendencia de tan prestigiosos galardones.

Sin ir más lejos, en BdP queremos rescatar algunas producciones americanas (los Emmy ignoran interesantísimas propuestas fuera de sus fronteras) que merecieron mejor suerte, y cuya ausencia de reconocimientos puede no hacer justicia a sus meritos.

Masters of sex

La sola existencia de una serie, que haga de sus protagonistas a los dos máximos responsables de los primeros estudios sobre la conducta sexual humana y su terapia, ya da cuenta de los ricos e innovadores planteamientos narrativos de las series en la actualidad. Pero es que además, su primera temporada ha ofrecido elaboradas reflexiones sobre los modelos familiares, los componentes sexuales de la pasión (y viceversa), y las discriminaciones laborales de genero, entre otras muchas cuestiones. Por eso, su nominación para Lizzy Caplan (actriz principal) y los estupendos Beau Bridges y Allison Janney (deberían ganar los tres) se hacen insuficientes. Michael Sheen ofrece la mejor interpretación de su carrera (The Queen y The Damned United entre otras) con ese reprimido y valiente doctor Masters.

Girls

La tercera temporada de la serie de Lena Dunham, podría ser definida como una “polifonia hipster del narcisismo”. Su protagonista, Hannah Horvath, no es perfecta, y todas su debilidades, egoísmos y excesos, son mostrados en la pantalla sin atenuar sus efectos. Resulta comprensible el rechazo que produce en gran parte del público y la crítica, pero impide apreciar que estamos ante uno de los relatos más sinceros y veraces de la televisión actual. Con esta nominación, se vuelve a reconocer la gran calidad del emergente Adam Driver, pero se la excluye de las categorías principales (mejor comedia, guión o dirección), teniendo en cuenta que con el 3×07 (Beach House), ha regalado uno de los diez capítulos del año.

The Good Wife

La quinta temporada de TGW, comentada hace unos meses por David en BdP, ha sido disfrutable como pocas. La mejor serie procedimental de la televisión americana, había exhibido unos 11 primeros episodios pluscuamperfectos. Lástima que su segunda mitad haya sido más descontrolada, afectando de esta manera a su cohesión. Pero no es excusa para que en 2014, no se haya reconocido su regularidad. Julianna Margulies (actriz principal), Christian Baranski (diosa) y Josh Charles (está nominado por su personaje, no por su interpretación) defenderán el honor de esta gran serie el 25 de Agosto.

Hannibal

También os avisamos desde este blog que el inicio de la segunda temporada de Hannibal hacía difícil mantener la intensidad y emoción en los doce capítulos restantes. Pues estábamos (afortunadamente) equivocados. La serie de Bryan Fuller ha mostrado imágenes inquietantes, dotadas por igual de repugnancia y lirismo, y una de las mejores historias escritas sobre el “ratón y el gato”. De hecho, incluso resulta creíble, desde el punto de vista psiquiátrico, en su forma de mostrar rasgos sociopáticos y psicóticos. Pero por encima de todo y de todos, están dos actores, Mads Mikkelsen y Hugh Dancy, que han dado una auténtico recital interpretativo. Me atrevo a incluir a la magnética Gillian Anderson como actriz invitada (si Paul Giamatti ha sido nominado en “Downton Abbey” por no hacer nada) entre los perjudicados por el ninguneo infringido a esta serie. Ni siquiera su Season Finale (para muchos el mejor capítulo del año) ha ayudado a que los conservadores académicos paladearan tan exquisito plato.

Que el elevado nivel de estas cuatro producciones (podríamos haber mentado a Boardwalk Empire o Parks and Recreation) sirva como ejemplo de lo casuístico y coyuntural de estos premios. Repasando las nominaciones, entran ganas de invitar a los votantes de los Emmy a una cena con el doctor Lecter.

Fco Javier Rueda Ramírez

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