Don Jon (2013)
Nota: 6,5
Director: Joseph Gordon-Levitt
Guión: Joseph Gordon-Levitt
Reparto: Joseph Gordon-Levitt, Scarlett Johansson, Julianne Moore, Tony Danza, Glenne Headly, Rob Brown, Brie Larson
Fotografía: Thomas Kloss
Duración: 88 Min.
El flirteo, el beso, el sexo… el amor. A veces no necesariamente en este orden pero siempre presentes en cientos, miles de pasteladas románticas de instituto, de bodas y de todos los colores que nos llegan cada fin de semana a la cartelera y de las que ya estamos más que empachados. Ha tenido que ser un novato en esto de escribir y dirigir largometrajes el encargado de darle una dosis de originalidad al cine de parejas. Y ya quisieran muchos directores con trayectoria hacerlo tan bien como él. Joseph Gordon-Levitt guarda todos los clichés en un cajón y nos regala una historia honesta y tragicómica sobre dos relaciones totalmente opuestas: la del pivón superficial y la de la mujer sensible, y además desde una visión egocéntrica pero cargada de humanidad. Contradictorio, ¿verdad?
Ha sido viajero en el tiempo en Looper, hijo de Lincoln en el biopic firmado por Spielberg, Robin en el universo Batman de Christopher Nolan y ya tiene una plaza en la secuela de Sin City. Su fama ha subido como la espuma y le ha otorgado tal influencia que ha sido capaz de conseguir a Scarlett Johansson para ponerle carne, labios y melena a la muñeca de su ópera prima y deshumanizarla. De utilizarla para dar forma a ese prototipo de mujer vacía, de pija insufrible a la que solo se puede conquistar a base de cubatas, músculos y palabrería de mercadillo. Jon -Don Jon- es un tipo de gimnasio con mucha labia y sobrado de dinero pero ese “diez” se lo va a poner muy difícil.
La rubia le va a chantajear hasta el punto de darse cuenta de su que su verdadera frustración no es solo abusar de una pornografía completamente alejada de la realidad, sino también no ser capaz de encontrar a una mujer que no mida su valía en calidad de pintalabios (y que además le quite su propia tontería de encima). Es entonces cuando aparece Julian Moore y comienza la verdadera historia de superación y comprensión mutua que nos pretende contar Gordon-Levitt.
La película logra sacarnos la carcajada hacia la primera mitad con escenas de enredos mientras nos va obligando a replantear ciertas cosas a medida que avanza el metraje. Lecciones emitidas a través de un protagonista con el que el espectador no se puede sentir nada identificado a priori. Es un guaperas cuya única preocupación es estar fuerte para que las chicas le miren en la discoteca. Un mantenido que ni siquiera tiene el graduado escolar y que le pone nota a las mujeres según su talla de sujetador. Un chulo playas en toda su definición, pero persona a pesar de todo. Además su familia es la típica sureña con un padre salido y adicto al fútbol, una hermana pegada al móvil y una mentalidad general de que todos los males se solucionan yendo a misa los domingos.
La intención es mostrar que hasta una mera hormona con patas sin ningún proyecto de futuro puede encontrar su lado tierno y superar sus frustraciones, que solo necesita a alguien que le escuche y a quien escuchar, que le ayude a valorar más a las personas empezando por el sexo opuesto. Y en mayor o menor medida es algo que a veces todos necesitamos.
Todo ello configura una línea argumental monotemática y una dosis de moralina que pueden acabar cargando. Pero la premisa del filme y su potencial cómico otorgan una hora y media de entretenimiento asegurado. Tenemos Gordon-Levitt para rato.
Manu Sueiro
Me ha gustado mucho tu crítica Manu, casi más que la película 😉 Me entretuve viéndola pero el final y la relación con Julianne Moore me parecieron un poco metidas a capón. Un saludo
Gracias Marble,
Me alegro que hayas disfrutado de la película. Y sí, todos parecen coincidir con tu impresión sobre el desenlace y el papel de Julianne Moore. Para mi el argumento se ajusta a lo que pretende Gordon-Levitt aunque resulte lineal y a veces forzado. Y si observas la filmografía de Moore verás que desde ‘Las horas’ sus papeles tampoco son para tirar cohetes… Aunque no será por falta de talento.
Saludos.