The Thing (La Cosa) (2011)
Nota: 5
Dirección: Matthijs van Heijningen
Guión: Eric Heisserer, Ronald D. Moore
Reparto: Mary Elizabeth Winstead, Eric Christian Olsen
Fotografía: Michel Abramowicz
Sinopsis: La paleontóloga Kate Lloyd (Mary Elizabeth Winstead) llega a la Antártida, donde se une a un equipo noruego que ha encontrado accidentalmente una nave extraterrestre enterrada en el hielo y descubre un organismo que parece haber muerto en una colisión hace miles de años. Pero está a punto de despertar…
En 1951, Christian Nyby (bajo la producción de Howard Hawks, para la RKO), realizó «El Enigma de otro Mundo», considerado actualmente un film de culto. En 1982, John Carpenter asumió el riesgo de hacer un remake de esta película, basándose en la misma historia corta de John W. Campbell; para asombro de todos, consiguió estar a la altura de su predecesora, merced a una acertada dirección, un buen reparto y unos efectos especiales rabiosamente innovadores para la época.
A día de hoy, tras haber visto «The Thing (La Cosa)», precuela de la película rodada en 1982, me siento incapaz de entender las intenciones de sus productores, más allá de recaudar un buen puñado de dólares a costa de un público nostálgico y hambriento de revival ochentero (como hemos comprobado recientemente con la decepcionante «Super 8»). Donde la película de Carpenter lograba crear numerosos momentos de irrespirable tensión, gracias a unas situaciones tremendamente claustrofóbicas y la a desconfianza que sienten todos sus personajes hacia los demás, el film de Matthijs van Heijningen responde al típico patrón de «sólo puede quedar uno», en el que la emoción y la tensión brillan por su ausencia.
Tal y como viene sucediendo en las últimas décadas, estos dos ingredientes tan importantes en el cine de terror, parecen quedar en manos de los técnicos de sonido. El director holandés intenta suplir estas carencias con una galería interminable de estruendosos ruidos, sintiéndose incapaz de reproducir aquello que hizo triunfar a la obra de Carpenter, en la que la música de Ennio Morricone sumaba, no sustituía.
Pero lo que más sorprende de este film es la alarmante falta de originalidad de su guión; los señores Heisserer y Moore, en un «alarde» de creatividad, se limitan a repetir (sin disimulo) el esquema de la película original, cambiando un par de detalles para justificar la etiqueta de precuela; nacionalizan noruegos a la mitad de sus personajes para poder enlazar la secuencia final de este film con las primeras imágenes del original -un helicóptero noruego persigue a un perro intentando matarle a tiro limpio- e introducen dos personajes femeninos con el fin de rebajar el «toque macho» del film de Carpenter, y así ampliar su público objetivo.
Y la verdad es que no hay que ser muy listo para intuir que todas estas maniobras resultan fallidas; ni siquiera Mary Elizabeth Winstead, tan carismática en «Scott Pilgrim contra el Mundo» interpretando a Ramona Flower, responde a las expectativas como protagonista, haciendo bueno al limitado Kurt Russell. En un film en el que sabes qué va a suceder, es necesario aportar algo diferente, sorprender al espectador, hacérselo pasar mal…, pero esto nunca sucede en «La Cosa (The Thing)».
Si lo que estas buscando es una digna predecesora de «La Cosa (El Enigma de otro Mundo)» de 1982 o una buena película de terror en la misma línea, olvídalo y quédate en casa; alquila la original o recupera «La Niebla» de Frank Darabont. Pero si disfrutas con unos buenos efectos especiales y no has visto la película de John Carpenter, puede que pases un buen rato.
Carlos Fernández Castro
