Treme (2010-2013)
Imagino que cuando David Simon termino «The Wire» debió pensar… ¿ Y ahora qué?. Ser el creador de una de las mejores series de televisión debe producir una importante sensación de vértigo («Generation Kill» fue realmente su siguiente trabajo, pero se trata de una miniserie de 7 capítulos). Quizás por ello, encontramos en «Treme» muchos lugares comunes con su mencionado trabajo anterior. El más evidente: vuelve a trabajar con dos de los actores principales de «The Wire» (Wendell Pierce, Clarke Peters). También vuelve a hablar de una ciudad norteamericana, en esta ocasión, Nueva Orleans, tres meses después de que el Katrina lo arrasará todo, otorgando especial atención a los músicos que viven y tocan allí, sobre todo en el barrio de Treme. Y es que la música juega un papel imprescindible en la serie, el Jazz; el Rythm and Blues o la música Cajun inundan su atmósfera en todo momento, compartiendo protagonismo con la historia de las personas que viven en Nueva Orleans.
Otro punto común entre las dos series de David Simon es la densidad y calidad narrativa de los guiones. Es verdad que esto hace que el ritmo sea lento, o al menos más de lo que es habitual en las series de televisión. Es evidente que busca un determinado tipo de espectador sin miedo a esperar para obtener un resultado final único. La trama consigue de forma gradual una conexion entre espectador, actores e historia tan solo al alcance de los más grandes. Los personajes entrelazan sus historias de manera fluida y natural (por fin algo con lo que tiene sentido comparar «Vidas Cruzadas»), tejiendo poco a poco durante el transcurso de la serie, una madeja de vivencias, cultura y superación que resulta una experiencia imprescindible.
La historia de «Treme» gira en torno a gente tan real como la que puedas encontrar paseando por la calle. El trombonista Antoine Batiste (Wendell Pierce), su ex mujer y propietaria de un bar Ladonna Batiste-Williams (Khandi Alexander), cuyo hermano menor esta desaparecido; la chef Janette Desautel (Kim Dickens), que lucha por mantener su restaurante abierto; McAlary Davis (Steve Zahn) músico orgulloso de su ciudad, Nueva Orleans; Alberto Lambreaux jefe indio (Clarke Peters); Toni Bernette (Melissa Leo) abogada de derechos civiles, su marido, Creighton (John Goodman), profesor universitario empeñado en apoyar a Nueva Orleans, mientras que culpa a los gobiernos locales y federales de la falta de previsión ante el desastre, y un par de talentosos músicos de la calle Annie (Lucia Micarelli) y Sonny (Michiel Huisman). AL igual que pasará en «The Wire» la historia resulta tan creíble y cercana debido en gran medida a unas actuaciones tan naturales como portentosas. En muchos momentos dudaremos si nos encontramos ante actores o gente que realmente vive en Nueva Orleans y han sufrido el Katrina en sus propias carnes. En cuanto a la calidad técnica, es desbordante, sin duda de lo mejor que jamás he visto; el piloto es un despliegue de clase y sofisticación sólo a la altura de las grandes de HBO.
La diferencia principal entre «Treme» y «The Wire» está en la esperanza que vemos en los personajes. Mientras que en la segunda se nos mostraba un Baltimore sin solución, rendido a la violencia, las drogas y la corrupción; en «Treme», el desastre ha sido desatendido por las autoridades (una vez más Simon pone en la picota a la clase política), pero la pasión por recuperar lo perdido, el fuerte sentido de hogar, la empatía y el optimismo que transmiten los ciudadanos de esta castigada ciudad, son el motor que hace que todo tenga sentido.
En definitiva, «Treme» es una serie superdotada en muchos sentidos pero que exige al expectador cierta paciencia para entrar en la historia; una vez que esto ocurre, aparece ante nosotros una serie espléndida, llena de humanidad, en la que tenemos la sensación de vivir, junto a los vecinos de New Orleans, una situación límite, de superación y amor por una ciudad y sus costumbres.
David Rubio Lucas
Para mí, la única serie ahora mismo que puede hacer caer a Six Feet Under del número 1 de mis series favoritas, me vuelve loca!
Treme no se ve, se vive!!
A mí me pasó que esperaba que Treme fuera The Wire pero con diferente localización, y no es que The Wire fuera mala, sino al contrario (para mí) pero no tenía más ganas de ver lo mismo pero con actores diferentes, hasta que termine por ver el piloto, la serie no me había convencido pero tampoco defraudado más bien sentía que me había dejado entre con ganas de más así que opté por ir viendo la serie y como bien dices, los personajes te van absorbiendo y te vas volviendo parte de Nueva Orleans, un ciudadano más que entiende por lo que pasan y que de cierta forma se proyecta en las historias, vive un poco a través de ella y al final las amas. Treme, ahora puedo decir, me cautivó, me sentí parte de los afectados por Katrina y es una serie que va dando pasitos pero que ahí va, y algo que creo es de suma importancia o más bien algo que la caracteriza es la música. El soundtrack de Treme es un deleite, se mezcla con las historias, se vuelven uno y te envuelven en en ellas. No se, a mucha gente no le gusta esta serie, pero a mí me ha parecido sensacional porque como bien señalas al final de tu texto te da esa esperanza, ganas de vivir, de lucha y de seguir.
Estoy empezando la segunda temporada (sé que hay una tercera, pero voy con calma 🙂
Me parece brillante.Suscribo las palabras de Bel Kendall.