Encontré al Diablo (Akmareul Boatda) (2010)
Nota: 7,5
Dirección: Kim Ji-Woon
Guión: Park Hoon-Jung
Reparto: Lee Byung-hun, Choi Min-sik y Jeon Gook-hwan.
Fotografía: Lee Mogae
Lo primero que tengo que decir de esta película es que no es apta para cualquier público. El afán de Kim Ji-Woon por reflejar de una forma extrema lo que sucede durante el metraje de “I Saw the Devil” hace de ésta, una experiencia que estoy seguro, no todo el mundo estará dispuesto a soportar. Es verdad que la violencia es usada con un propósito, y como medio para reflejar lo que el director quiere hacer llegar al espectador: situaciones y sentimientos muy primarios que inspiran los actos de los personajes. Todo es presentado de una manera extrañamente real, exagerada e incluso en ocasiones, grotescamente violenta, no dejando nada en manos de la imaginación.
El autor de la aterradora “A Tale of Two Sisters” (2003) cuenta en esta ocasión para desarrollar la historia de “I Saw the Devil” con dos pesos pesados de la interpretación en Corea: Lee Byung-hun, que interpreta a Su-Hyeon, agente especial del departamento de inteligencia Coreano, que ve como su mujer embarazada es brutalmente asesinada. Y en segundo lugar, con Choi Min-sik (Old Boy), que interpreta a Byung-Hun, asesino de la mujer de Su-Hyeon y de tantas otras. Los dos realizan unas interpretaciones formidables, siendo creíbles en todo momento la ira, el rencor y la sed de venganza de uno, y la locura del otro. La trama fluye con una velocidad sofocante, no dejando en ningún momento que el tempo decaiga ni lo más mínimo. Como buena película coreana comparte dos notas muy significativas, sobre todo la primera: el peculiar sentido del humor que tiene y que choca con el tono macabro y crudo del film. Y en segundo lugar, no saber concluir la película a tiempo, alargándola en demasía. Posiblemente ese sea su punto más débil. Sus 141 minutos se hacen muy largos, pese a la frenética acción que se nos presenta durante este tiempo, parece que Kim Ji-Woon se entretiene más de lo necesario en el ritual de venganza y tortura en el que se convierte la última hora larga del film.
Visualmente la película es magnífica. La cámara simple pero efectiva, se sitúa en muchas ocasiones muy cerca de los actores para mostrar con facilidad el contraste de los dos personajes. Sus gestos, su aspecto o sus miradas son diametralmente diferentes, aunque en el fondo y al final, se parecen más de lo que se piensan. Es evidente que Kim Ji-Woon derrocha talento para narrar cine de acción, las peleas y persecuciones están rodadas con una facilidad sorprendentes.
Hace unos días hablamos de Donnie Darko, película tan hipnóticamente fascinante como hermética e indescifrable. Estoy seguro que muchos de los lectores que leyeran la crítica y la hayan visto habrán pensado que es una obra absolutamente sobrevalorada e incomprensiblemente defendida por Carlos, en este caso. Salvando las distancias, algo muy parecido puede pasar con “I Saw the Devil”, el espectador debe enfrentarse a su visionado con la mente abierta y preparado para recibir algo que por una u otra razón le va a impactar por poco habitual. Si somos capaces de ver más allá de lo llamativo, disfrutaremos con una película que aborda con valentía los instintos animales que todos guardamos bajo llave; si no lo somos, la quitaremos a los 15 minutos.
David Rubio Lucas